“Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer», la serie de Netflix sobre uno de los asesinos más sanguinarios, ha alcanzado una gran popularidad en todo el mundo con sus 10 episodios.
Producida por Ryan Murphy y protagonizada por Evan Peters, la serie nos aproxima al historial de asesinatos del criminal y los fallos en el sistema que le permitieron esconderse por más de 10 años.
Dahmer, quien falleció atrozmente hace varias décadas, fue muy temido en Estados Unidos debido a que habría acabado con la vida de casi 20 personas. Pero ¿cómo fue que las autoridades lograron capturar a este criminal?
El detalle que alertó a la policía
Según recoge People, en julio de 1991, Jeffrey Dahmer se aproximó a un grupo de tres hombres para ofrecerles hacerles fotografías desnudos. Uno de ellos, Tracy Edwards, accedió y lo siguió a su departamento para realizar la sesión.
Ya en el lugar, Dahmer puso unas esposas en la mano de su potencial víctima y fue ahí cuando sacó un cuchillo, lo puso en el pecho de Edwards y confesó que quería comer su corazón. En un momento de descuido, Tracy logró golpearlo y tumbar a su victimario al suelo.
El joven salió corriendo en busca de ayuda y se topó con un par de policías, a quienes guio de regreso al departamento de Dahmer. En este punto, los agentes no necesariamente creyeron lo que escuchaban, hasta que vieron unas imágenes Polaroid, las cuales retrataban diversos desmembramientos.
Jeffrey trató de huir, pero no pudo hacer mucho. El 22 de julio de 1991 fue puesto bajo arresto y confesó que había cometido un total de 17 asesinatos.
El día de su detención, la Policía no anticipaba que estaba por descubrir una perturbadora escena en el refrigerador de Jeffrey Dahmer. De acuerdo con el portal Clarín, en aquel momento hallaron que la nevera almacenaba cabezas humanas reales y partes cercenadas de varios cuerpos.
Para el año siguiente, el ‘Monstruo de Milwaukee’ fue encarcelado de por vida. En total, fue condenado a 16 cadenas perpetuas.